habla el rescatista

"Yo observaba a la persona": así fue el operativo para rescatar el cuerpo en cantera Nueva Carrara

Los buzos se sumergieron en seis oportunidades a las aguas de la cantera Nueva Carrara; el operativo para rescatar al joven fallecido se extendió por más de 24 horas.

La tecnología de una ecosonda fue clave para delimitar el perímetro de búsqueda en la cantera de Nueva Carrara en Maldonado este domingo y lunes. Rescatistas del Grupo Voluntario de Búsqueda y Rescate de Pan de Azúcar pusieron sus recursos a disposición al enterarse que un joven de 22 años permanecía desaparecido en ese pozo de agua artificial.

La policía fue informada de que sobre las 14:00 horas del sábado un joven desapareció de la superficie, luego de ser atacado por abejas y tirarse al agua, según el relato de su primo que lo acompañaba. Ese día no hubo novedad del operativo, que incluyó incluso la búsqueda aérea con un helicóptero del Ministerio del Interior.

El domingo por la mañana, sobre la hora 8:00, el Grupo Voluntario de Búsqueda y Rescate de Pan de Azúcar se sumó a las tareas y, a unos 20 minutos de trabajar con la ecosonda, se halló el cuerpo. El dispositivo permitió hacer una radiografía del suelo de la cantera, identificando todos los objetos que allí existiesen. Pese a la profundidad, que en algunas zonas alcanza los 40 metros.

El cuerpo fue identificado sobre las 8:20 del domingo, a una profundidad de algo más de 15 metros. Se hicieron varios rastreos, y los buzos de la Armada Nacional, que eran tres, se sumergieron en seis oportunidades. "Yo observaba a la persona", dijo a Subrayado uno de los integrantes del grupo voluntario, Néstor Casaña. Es además quien traduce lo que observa en la ecosonda, para luego transmitirle a los buzos.

"Nosotros que estamos con la ecosonda somos los ojos y ellos (los buzos) son las manos", graficó. Es el primer rescate hidrográfico que realizan, y es el primero en Uruguay, según dijo. Fue necesario contar con ese dispositivo: el sonador, que es propiedad de Martín Cuello, otro de los integrantes del grupo de voluntarios, que lo ofreció al instante.

Tras hallar el cuerpo la mañana del domingo, fue enterada la familia de la víctima, que estaba en el lugar. Las tareas para intentar sacar el cuerpo siguieron adelante, pero caída la nochecita se dificultaba la operación, por la profundidad y la posición del joven fallecido.

"El agua estaba muy fría, y empieza a castigar el cuerpo de los buzos, luego de 20 a 30 minutos", según explicó Casaña. Además, la visualización se dificulta luego de los 10 metros de profundidad, y la hace menos precisa. Sumado a que es una cantera de profundidades diversas con piedras y pozos. Según observó Casaña, hubo hace tiempo un derrumbe en la cantera, que formó "cuevas" y "piedras sobre piedras".

El Grupo Voluntario de Búsqueda y Rescate de Pan de Azúcar hace rescates desde hace 94 años, y Casaña lo integra desde hace 34. Lo integró también su tío, y antes su abuelo. Los trabajos son honorarios, y sus recursos son donaciones o compras que sus integrantes pueden hacer. Casaña destacó el agradecimiento que le hicieron llegar, y pidió que tanto grupos civiles como el Estado, puedan trabajar juntos en intervenciones de este tipo.

El joven fallecido tenía 22 años. Era de Montevideo y había ido con su primo y otros dos jóvenes. Con su familiar caminaba por la parte más baja de la cantera cuando ambos fueron atacados por abejas. Se tiraron al agua y su primo no lo volvió a ver, según la información que recibió la policía la tarde del sábado, y que informó entonces Subrayado.

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