Fueron condenados dos argentinos y una uruguaya por el copamiento en una vivienda de Punta del Este

El pasado 10 de febrero, los ciudadanos argentinos llegaron desde Buenos Aires para cometer el copamiento. Se alojaron en un hotel de la ciudad de Maldonado y, en horas de la madrugada, se dirigieron a la vivienda.

Al llegar al lugar se encontraron con una pareja que estaba durmiendo junto a sus dos hijos, de 9 y 6 años, al igual que una anciana de 91 años.

Los copadores fueron al dormitorio de la pareja, los ataron de pies y manos y al hombre le taparon la cabeza con una funda; posteriormente lo golpearon y amenazaron exigiéndole el dinero.

Según informó la Fiscalía, en todo momento los delincuentes hablaron por celular con otra persona, quien amenazaba al dueño de casa manifestándole conocer detalles íntimos de la familia, como nombres, rutinas, lugares, entre otros.

La situación de privación de libertad se extendió por aproximadamente cuatro horas, hasta que los autores se retiraron a pie con el dinero robado, unos U$S 2.500 y $ 15.000 uruguayos. En el camino se descartaron de la ropa utilizada y del celular del hombre agredido.

Luego de una serie de investigaciones, los autores del copamiento fueron detenidos en la ciudad de Colonia; contaban con el dinero robado y el celular de la esposa del dueño de la vivienda, además estaban a punto de salir del país hacia Buenos Aires.

A través del análisis de los celulares y registros fílmicos, los investigadores lograron comprobar que la mujer había sido quien aportó los detalles para llevar a cabo el copamiento, probándose, además, que iba a participar en la división del dinero robado.

Según se supo en la investigación, la mujer tenía una relación sentimental con una persona privada de libertad en la República Argentina, que fue quien realizó la planificación del copamiento y mandó a los autores desde ese país. La mujer aportó todos los datos de la familia, le comentó que su esposo tenía dinero y propiedades, dio la ubicación de la casa y mandó un video con la distribución interna de la misma.

De la investigación surgió también que, un mes atrás, la mujer había entregado a uno de los argentinos condenados las llaves de un apartamento en Punta del Este, propiedad de la madre de la víctima, el cual había sido robado en dos oportunidades por este.

El abogado de la mujer alegó que esta había actuado bajo amenazas y violencia psicológica ejercida por el planificador del delito, introduciendo así una teoría del caso alternativa a la de la Fiscalía, pero no se logró acreditar.