El juego es Poppy Playtime y su personaje un monstruo azul llamado Huggy Wuggy. En la plataforma nada incita a la autolesión, pero en YouTube aparecen videos sobre el personaje en cuestión que alienta a los niños a lastimarse.
Los videojuegos y los niños: recomendaciones de una especialista a los padres
Para los psicólogos, el problema de las autolesiones en niños no radica únicamente en los videojuegos, sino que es parte de un asunto global de salud mental.
En Uruguay, siete escolares de una escuela de Barros Blancos se cortaron con la hoja de un sacapuntas a partir de este animado terrorífico. Dos debieron ser internados, uno en Pando y otro en el Hospital Pereyra Rossell.
La psicóloga Lorena Estefanell reflexionó sobre el fenómeno en Arriba Gente donde indicó que el problema no es el videojuego en sí sino la salud mental de los niños.
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“Rápidamente, empezamos a mirar las variables que no tienen que ver con nosotros. Empezamos a generar paranoia con los videojuegos. Empezamos a pensar que, en algún punto, el individuo parecería ser como una hoja en blanco, donde viene el juego se capta a tu niño, lo transforma en una persona que se autolesiona, y es un espanto el juego”, afirmó Estefanell.
Instó a pensar que “acá hay un individuo, hay un niño, hay una familia, hay una cantidad de preguntas que nos tenemos que hacer que, en algún punto, son las que nos empoderan. Nosotros vivimos generando discursos de indefensión. Estamos todo el tiempo hablando del problema y además de las partes del problema que no dependen de nosotros”, enfatizó.
La especialista recomendó enfocarse en las variables que inciden en la salud mental del niño y sobre las cuales sí podemos tener control y en las estrategias positivas para afrontar los eventos adversos de la vida.
“Saber pedir ayuda es toda una habilidad. Saber darte cuenta de lo que te pasa es toda una habilidad. Poder construir bienestar cuando te sentís mal es toda una habilidad. Entonces, de la misma manera que nos estamos preocupando por el desarrollo por competencias, el bilingüismo, la creatividad, el preparar a la gente para el futuro, uno podría decir: ‘bueno, necesitamos enseñarle a las personas a que puedan generar alternativas distintas a pensar en la muerte como una forma de solucionar el dolor’”, subrayó.
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