PLAN DE SANEAMIENTO VI

Cuáles son las obras que hará la Intendencia de Montevideo con el crédito del BID

Al lograr votos en la Junta Departamental de Montevideo para aprobar crédito a largo plazo, Cosse puede ejecutar plan de saneamiento.

Unos 13.500 vecinos de Montevideo podrán acceder a saneamiento, como consecuencia del plan acordado por la Intendencia capitalina (IMM) con las bancadas de ediles de la oposición, que habilitará un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Luego de que fracasara la primera propuesta, ahora sí la administración de Carolina Cosse tiene la mayoría especial en la Junta Departamental para aprobar el crédito de USD 70 millones que ha gestionado ante el BID.

El crédito del BID es a 25 años por lo que la aprobación requería dos tercios de la Junta, o sea 21 ediles, y el Frente Amplio tiene 18 bancas.

Los cuatro ediles del Partido Colorado (PC) oficializaron que apoyarán el plan de obras y su financiamiento, por lo que ya están al menos los 21 votos que necesitaba la Intendencia de Montevideo para aprobarlo. La bancada del Partido Nacional quiere negociar algún aspecto más, pero también se inclina a votarlo.

Falta que eso se haga efectivo en la Junta.

El plan de la IMM consiste en llevar saneamiento a casi 13.500 vecinos que no lo tienen y a la mejora en algunos tramos de la actual red de saneamiento. En la IMM destacan que el plan permite disminuir el riesgo de inundaciones en las zonas en las que se van a intervenir y mejorar el drenaje.

Las zonas donde se intervendrá son: Casabó Norte y Rincón del Cerro (unos 2.250 habitantes en 22 hectáreas de terreno), Paso de la Arena (con unas 6.500 personas) y barrio “Bola de Nieve” (que comprende a 4.700 personas).

El proyecto incluye el refuerzo del colector principal de la cuenca del arroyo Mataperros y mejorar la gestión de la red Arteaga.

Del plan original, que no tuvo votos en la Junta, hay una parte destinada a inversión en el rubro limpieza que quedó fuera del crédito. Para eso, fuentes de la IMM dijeron a Subrayado que “lo que se va a poder hacer es mucho menos ambicioso de lo que pretendían”. Por ejemplo, no harán las plantas de reciclaje, ni los eco-centros que se proyectaban.

En cambio, sí se va a ampliar la colocación de bolsones en cooperativas y edificios, que son utilizados para depositar residuos secos reciclables, y son llevados a plantas especiales de reciclaje. El proyectado fideicomiso adicional pagaría esa parte del plan, que abarca la compra de camiones y algún eco-centro móvil.

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