Con entradas agotadas se llevó a cabo una nueva etapa del concurso de carnaval, la número 11, en la que los parodistas Zíngaros fueron los grandes protagonistas.
Zíngaros, La Buchaca, Momolandia y Tabú en el Teatro de Verano
Este domingo se desarrolló una nueva etapa, la número 11, del concurso oficial del carnaval.
Un notable espectáculo carnavalero brindó el grupo de Pinocho Sosa con todos los condimentos exigidos. Mucho humor en sus parodias, muy buenos actores que consiguieron siempre el efecto buscado, cantantes formidables capaces de emocionar con sus voces, un ritmo avasallante y visualmente impactante.
El clásico de la comedia francesa La jaula de las locas y La sociedad del olvido sobre la vida y las penurias de los pacientes del Hospital Vilardebó fueron los temas elegidos para parodiar y en ambos casos el resultado fue muy positivo. El grupo de Pinocho cumplió con creces con la expectativa creada que llevaron al público a agotar las entradas por primera vez en el concurso.
La murga La Buchaca dejó la sensación de tener varios aciertos en su libreto pero la interpretación no fue la mejor y eso solo permitió que insinuaran el buen espectáculo pero no lo pudieron concretar. Es uno de los grupos que tienen buen material para crecer cuando hagan su segunda visita al Teatro de Verano.
La potencia y la calidad del coro de la murga Momolandia volvió a ser gran protagonista de la noche. Esta selección de estupendas voces murgueras fueron conducidos una vez más por la talentosa batuta de Diego Berardi y lograron conmover hasta los oídos más exigentes.
En cuanto al libreto el espectáculo tiene algunos momentos mejor logrados que otros. Martín Perrone y Germán Segredo cumplieron con su cometido de generar los mejores momentos de humor pero desde sus diálogos que sirvieron de enganche entre los cuplés.
Si bien en los momentos iniciales el libreto no logró atrapar al público, la historia se va haciendo más atractiva a medida que transcurre la actuación. Además el espectáculo de la revista Tabú se desarrolla con una solidez musical y coreográfica que alcanzó niveles de excelencia.
Todo el elenco responde con solvencia y la actuación de la revista resultó muy aplaudida. El vestuario es excepcional y le puso un toque de brillo y colorido al espectáculo. Demostraron tener muy buenas armas para defender el título obtenido el año pasado.
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