Médicos y padres reclaman a la dirección de la Peluffo Giguens

Aseguran que la situación es crítica a causa de la administración de la Fundación, que aún está a cargo del servicio de Hemato-Oncología Pediátrica del Pereira Rossell.

 

En el año 2011 médicos y directivos de la Fundación Peluffo Giguens comenzaron con diferencias en cuanto a la gestión de la organización, que se transformaron en irreconciliables. En 2012 los médicos y el personal escindido crearon una nueva fundación, llamada Pérez Scremini.

La nueva entidad se hará cargo del Servicio de Hemato-Oncología Pediátrica del Hospital Pereira Rossell y sustituye la parte operativa de la Fundación Peluffo Giguens, que continúa bajo la dirección de Jorge Bartesaghi.

Si bien eso está aprobado por ASSE aún faltan algunas formalidades para que se ponga en práctica. La idea es que entre en vigencia el próximo 1º de marzo. Mientras tanto, la parte operativa sigue a cargo de la Peluffo Giguens y los médicos denuncian que la situación esta cada vez peor.

“Las pocas cosas que se reponen es porque los padres y los médicos conseguimos algunas donaciones”, dijo el doctor Ney Castillo.

Además, señaló que no tienen aire acondicionado ni ventiladores suficientes, tampoco bandejas, reactivos o materiales de limpieza, y dijo que algunas paredes tienen fisuras y que la estructura en general se está deteriorando.

Castillo asegura que han presentado denuncias formales ante las autoridades de la Fundación Peluffo Giguens pero no han obtenido respuestas positivas. “Es un motivo de preocupación porque hay cuentas bancarias importantes a nombre de una fundación que se dice que apoya al niño con cáncer y como estamos denunciando, no es ese el hecho”, afirmó.

Familiares de niños que son y fueron pacientes del servicio concuerdan con las declaraciones de Castillo y apoyan en los reclamos.

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