Falta de logros le pasan factura a Mujica, a mitad de su mandato

Al presidente le llega la hora de evaluar el primer tramo de gestión. Le urge que 2012 sea el "año bisagra", pero a mitad de año lleva apenas 29 leyes aprobadas

El gobierno está llegando a la mitad de su mandato y el presidente José Mujica viene desde hace meses aleccionando a sus ministros sobre la necesidad de logros.

A pesar de que el país vive unos de los momentos económicos más florecientes de su historia, con una desocupación de alrededor del 6% y un récord de consumo y exportaciones, la Administración Mujica no está conforme con sus resultados.

Hasta el momento, la gran meta alcanzada por el gobierno ha sido la concreción de la Patente Única de Rodados, un hecho político sin precedentes en la historia del país que llevaba más de 40 años de negociaciones, idas y venidas.

Las comparaciones con la gestión de Tabaré Vázquez -cuya candidatura a 2014 aparece cada vez más clara- no lo favorece: la política macroeconómica viene desde la otra administración.

El propio presidente reconoció anoche que el 26.5% de niños uruguayos por debajo de la línea de pobreza es una "cuenta pendiente".

Entre otras cosas en el debe le endosan a Mujica la redistribución de la riqueza y la inseguridad pública, que provienen del gobierno Vázquez.

Hoy los diarios El Observador y El País dedican hoy su tapa a pasar raya a esos temas que el presidente plantea como prioridades y hasta ahora no han tenido concreción.

El Observador presenta como título principal "El Gobierno no materializó ninguna de sus 50 prioridades para 2012", al promediar el año.

La nota sostiene que Mujica estima que este será el "año bisagra" en materia de concreciones.

Ayer en el programa "La sed y el agua" de Televisión Nacional, el presidente destacó algunas de sus principales preocupaciones actuales: el puerto de aguas profundas de La Paloma, el aumento de la violencia criminal y no criminal (muertes por picadas de motos, más de 40 asesinatos por violencia doméstica, los homicidios por ajustes de cuentas) y una oposición a la que adjudicó "una actitud penosa" a la hora de colaborar con la gobernabilidad.

Entre los temas que todavía siguen en carpeta del presidente, está la ley de telecomunicaciones, la tenencia responsable de armas, la ley de extranjerización de la tierra -un pedido de los sectores más dirigistas de la coalición-, la reforma educativa y la "Universidad Tecnológica", entre otros temas que fueron obsesión en su agenda y luego perdieron fuerza por la vía de los hechos.

Otros temas no estaban concebidas en formato de ley, pero fueron temas prioritarios para el presidente, entre otros como la interconexión eléctrica San Pablo-Montevideo, la planta regasificadora con Argentina, la ampliación de las políticas de asignaciones familiares, lactancia, empleo juvenil y otros asuntos de primer nivel.

Según El Observador, en lo que va del año el gobierno logró aprobar 29 leyes.

Por su parte, el diario El País advierte sobre la grave situación de AFE, otro tema de obsesión para el presidente, especialmente durante su viaje a Alemania de 2011. Allí se establecieron lazos para reactivar el ferrocarril, algo que el gobierno viene trabajando desde hace años conjuntamente con un pase de la empresa a un régimen público-privado.

En estos días, AFE decidió la supresión de algunos servicios de pasajeros, un hecho que levantó protestas en varias localidades del país. La empresa aduce problemas de personal, un déficit millonario y la necesidad de inversión de unos 430 millones de dólares. El Estado debe pagar ya un fuerte subsidio para mantener la empresa funcionando.

"AFE atraviesa un atraso tecnológico significativo", dijo el nuevo presidente de la empresa, Jorge Setelich.

Dejá tu comentario