La justicia argentina condenó con penas de hasta diez años de cárcel a seis exintegrantes de la Prefectura (policía naval) por torturar a dos jóvenes, uno de 15 años, en un juicio oral que concluyó este viernes.
Diez años de cárcel a 6 integrantes de la policía naval por torturas en Argentina
Fueron hallados culpables de los delitos de privación ilegítima de la libertad, torturas, lesiones, robo agravado y calificado por uso de armas de fuego.
El tribunal oral criminal 9 de la Ciudad de Buenos Aires los halló culpables de los delitos de privación ilegítima de la libertad, torturas, lesiones, robo agravado y calificado por uso de armas de fuego y de haber cometido estos crímenes como miembros de las fuerzas de seguridad.
Los hechos ocurrieron el 24 de septiembre de 2016 cuando los seis prefectos interceptaron a dos jóvenes, entonces de 18 y 15 años, en la empobrecida Villa Zabaleta, en el barrio Barracas de la capital argentina.
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Según se ventiló en el juicio, los prefectos los golpearon con bastones, los quemaron con cigarrillos, los esposaron a una baranda y simularon fusilarlos colocándoles el arma en la boca.
Tras ser procesados, la Prefectura los exoneró de la fuerza.
Tres de los exprefectos fueron condenados a diez años y seis meses, los otros tres a ocho años y 11 meses.
"Con la condena a los seis prefectos me siento mucho más tranquilo, porque hoy empieza a borrarse un nudo en la panza que llevó desde hace dos años", declaró Iván Navarro, una de las víctimas, quien tenía 15 años cuando fue torturado.
El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) que patrocinó a las víctimas emitió un comunicado en el que alertó que "si bien el ministerio de Seguridad de la Nación dio de baja a los seis prefectos hoy condenados, nada hizo la autoridad política por modificar sus rutinas violentas".
"Las relaciones problemáticas entre prefectos y jóvenes en el barrio no aparecen como una preocupación de las autoridades. El resultado es la persistencia y la intensificación de la violencia institucional en la zona sur de la ciudad", denunció el organismo.
El mes pasado un prefecto mató de dos disparos a un joven de 26 años que circulaba en una camioneta y no se detuvo en un control de tránsito.
Filmaciones registraron que tras los disparos otros siete prefectos observaron al joven herido de muerte, recogieron las vainas servidas y se fueron.
El prefecto que disparó fue acusado de homicidio agravado y está arrestado, al igual que sus compañeros, detenidos por encubrimiento y abandono de persona. Los ocho fueron exonerados de la fuerza mientras la causa espera elevación a juicio.
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