Carnaval de La Pedrera: empezó el tiempo de la autocrítica

El alcalde dijo que la fiesta deja US$ 700.000 pero no queda nada en el balneario. Y se cruzó con los vecinos por los impuestos. La oferta de apoyo del gobierno: US$ 500

Tras el controvertido Carnaval de La Pedrera, comienza la estimación de costos y beneficios. El alcalde de La Paloma, Alcides Perdomo, salió con todo.

Según el jerarca, la fiesta deja unos 700.000 dólares de ganancia pero poco de ese dinero queda en el balneario.

Perdomo, un militante del MPP, se hizo conocido este verano al negarse a darle apoyo oficial a los eventos que usaran promotoras provocativas.

El Carnaval de La Pedrera lo puso otra vez en el ojo de la tormenta y disparó con vecinos, autoridades de gobierno y propuso empezar a trabajar para 2013 a efectos de evitar el caos que se dio este año.

El alcalde también se quejó del poco apoyo del gobierno. "Vino el ministro (de Turismo, Héctor) Lescano y le pedimos que concretara un apoyo al Carnaval. Nos ofreció 500 dólares", según contó este miércoles al diario El País.

La autoridad civil dejó entrever que las protestas de los vecinos tienen otro sustrato, que es el de los impuestos que pagan en la zona y por el cual pretenden una contrapartida.

Los residentes sostienen que la contribución aumentó 217% en los últimos siete años.

Perdomo cree que no tienen razón para protestar, y dice que deberían pagar más tributos por disfrutar de uno de las mejores locaciones de Uruguay.

"En la Pedrera hay casas que valen 1,5 millones de dólares y pagan 15.000 pesos. En La Paloma, sin embargo, pagan 40.000. Tienen que pagar más", señaló.

Las observaciones también alcanzaron al dispositivo de seguridad. El Jefe de Policía, Oscar Miraballes sostuvo que no hubo altercados graves -agunas riñas, dos denuncias de hurtos-  más allá del accidente en el que murió el joven Iván Gajduk.

De todos modos, fuentes policiales admitieron a El País que es imposible controlar 25.000 turistas con 75 agentes.

En realidad, las denuncias fueron más por invasión de casas (gente hallada durmiendo patios o usando instalaciones de fincas sin permiso)  y por algún incidente no policial: la sobredosis padecida por un joven que consumió una mezcla de cocaína con ácido lisérgico

De todos modos, hubo otras voces optimistas. El intendente de Rocha, Artigas Barrios, reivindicó lo hecho: "las cosas salieron bien", dijo.

"Si no fuera por la intendencia, en La Pedrera no quedaba nada", comentó al diario El Observador.

Barrios, de extracción socialista, dijo que, más allá del carnaval, promoverá una norma que prohibirá la música alta en boliches después de la 2 AM.

El  jefe comunal puso un ejemplo familiar para explicar lo que pasó en La Pedrera: "hacés una fiesta en tu casa y tenés lugar para 300 personas. Pero vienen 800 y te arreglás. Ahora, si viene el 801 le tenés que decir que se vaya".

"No es culpa de nadie que venga mucha gente. Lo que decimos es que no podemos prohibirlo o suspenderlo  porque no lo convocamos nosotros. Para suspenderlo habría que poner un piquete militar afuera del balneario", aseguró.

Uno de los más innovadores fue Pedro Quartino, secretario general de la Intendencia de Rocha, quien propuso llevar la fiesta a "un estadio", según informó hoy La República.

Como segunda propuesta, Quartino planteó cobrar entrada -una "simbólica", explicó- y limitar la cantidad de personas que participen del Carnaval. 

Dejá tu comentario