Asociación de Escribanos apoya al No, y profesionales salieron al cruce

“Hoy podemos decir con total certeza que es una ley aprobada y comprobada ya que lleva dos años de vigencia. En estos dos años nunca hubo un perjuicio ni económico, ni jurídico de ningún tipo. Simplemente es una ley que trajo claridad jurídica y claridad comercial”, indicó y explicó que se decidió en comisión directiva, “que tiene las suficientes potestades para definir las acciones y defender a su gremio”.

Por otra parte, el escribano Oscar Mafei sostuvo que la comisión directiva no puede tomar este tipo de decisiones y que hubiera correspondido convocar a una asamblea general. No obstante, subrayó que el pronunciamiento excede el objeto de la asociación.

“Que nos facilite a nosotros la tarea como profesionales, no implica decir que la ley es de buena calidad. Que damos fe de decir la verdad con respecto a esta ley. No, señores. Eso está equivocado. Académicamente está mal, profesionalmente está mal, y la Asociación de Escribanos no solo no me representa como escribano en este caso, en esta postura, sino que tampoco me representa como ciudadano. Porque acá está haciendo un pronunciamiento político de la asociación como un total o de todos los escribanos inclusive, más grave aún”, explicó.

Mafei reconoce que los cambios hacen más sencilla su actuación respecto del control del pago o entrega en una operación o negocio jurídico. Sin embargo, no acompaña los artículos de la LUC que modifican la ley de inclusión financiera ni el resto del articulado.

El escribano sostiene que habla a título personal y que su punto de vista respecto de la formalidad es compartido por colegas más allá de lo que resuelvan a votar el domingo.