Argentina: niña fue muerta a golpes, quemada y tirada a un arroyo

Su madre, Silvia Lafuente de 34 años y su actual pareja, Pablo Verón, un ex policía federal de 30 trataron de hacer desaparecer el cuerpo, primero quisieron quemarlo en la parrilla y como no lo lograron, lo pusieron en una bolsa de basura lo llevaron en un carrito de bebé hasta un arroyo donde lo tiraron. Las imágenes de la pareja, con dos hermanos de Priscila y un adolescente caminando hacia el arroyo, quedaron grabadas en la cámara de seguridad de una estación de servicio.

La autopsia determinó que el cuerpo presentaba múltiples traumatismos como consecuencia de los golpes recibidos y quemada después. 

Ambos están detenidos. La mujer fue acusada por homicidio agravado y el padrastro por encubrimiento agravado. Ambos negaron los cargos ante la justicia.

Priscila nació prematura y siempre tuvo problemas de salud. Vivió un tiempo con su padre y después con su abuela materna y su tía.

Según contaron los vecinos al diario Clarín, la mujer “con una mano la tomaba de los pelos y con la otra le pegaba trompadas con el puño cerrado en la cara”. Además aseguraron que el matrimonio ponía la música muy alta para que no se escucharan los gritos de los niños cuando eran golpeados. 

Este jueves se supo que la madre de Priscila podría ser investigada por la muerte de otro de sus hijos. El bebé de cuatro meses falleció por asfixia y en ese entonces la mujer aseguró que el menor se ahogó con su propio vómito. 

Según el diario La Nación, se podría disponer la exhumación del cuerpo del menor para determinar si se trató de un accidente o fue un homicidio.

Foto: 24con