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Polémica tras la muerte de un niño aplastado por un carro
Clasificadores aseguran que los llevan a trabajar para que la Policía no los "apalee". La Intendencia advierte que está prohibido que menores conduzcan los carros.
Tras la muerte de un niño de siete años aplastado por un carro tirado por caballos el pasado sábado, se volvió a abrir la polémica sobre la prohibición o reglamentación de este medio de transporte en la ciudad. Sobre todo, por la presencia de niños en ellos y los peligros que esto pueda representar para su seguridad.
Subrayado conversó con Patricia Gutiérrez, clasificadora, madre de seis hijos y abuela de siete nietos, quien dijo que muchas veces los clasificadores deben usar a los niños "como escudo".
"En el horario de la noche tenemos que usar a los gurises prácticamente como escudo, porque hemos hablado con (el ministro del Interior, Eduardo) Bonomi, pero no hemos tenido respuesta. Los milicos nos apalean a los clasificadores en la calle, nos hacen requisas y nosotros usamos a los gurises para evitar que nos caguen a palos. Porque para el clasificador no se terminó la dictadura", aseguró.
La mujer aseguró que los niños no pasan toda la noche en la calle, ya que los clasificadores tienen horarios de trabajo y dijo que, al otro día, todos van a la escuela.
"Van, sí. Porque al botija vos lo tirás arriba de un carro, le ponés frazadas, le ponés nylon y va durmiendo y vuelve durmiendo. El gurí, de 12 para abajo, no anda trabajando por necesidad de ayudar a los padres, sino porque no tienen donde dejar a esos niños", explicó.
De todos modos, Gutiérrez dijo que hay situaciones en las que es necesario que los menores trabajen y puso como ejemplo a su familia: "Yo tengo un hijo de 18, que tiene una nena de cinco, es decir que la tuvo de menor. A él lo tenía que mantener yo o tenía que salir a ayudarme para mantener a su familia".
PERMISOS. Las normas municipales permiten el uso de carritos tirados por caballos para clasificar, pero prohíben específicamente que sean conducidos por menores.
Subrayado se comunicó con las divisiones Transporte y Desarrollo Ambiental de la Intendencia de Montevideo para obtener respuesta sobre si existe una reglamentación para la seguridad de la circulación de carros tirados por caballos. Las autoridades no quisieron hablar en cámara, pero citaron las normas contenidas en el Digesto Municipal sobre la tracción animal.
La División Limpieza de la comuna tiene un registro de los clasificadores que circulan en vehículos con tracción a sangre. La Intendencia es clara en que se prohíbe la circulación de carritos y personas que no estén registradas ni hayan cumplido con el censo de clasificadores. Los carros deben estar pintados mayoritariamente de blanco y tener material refractario en la parte trasera y laterales.
Están habilitadas para la circulación de carritos de clasificadores todas las zonas de la capital, menos las avenidas y ramblas y las zonas comerciales, en el horario de 5 a 22 horas. Asimismo, el digesto es claro en que se le aplicarán a los clasificadores y sus correspondientes vehículos las normas de tránsito que rigen en el departamento.
MENOR FALLECIDO. El pasado sábado, la familia se trasladaba con cajones de verdura e implementos para armar un puesto en la feria del barrio, cuando el carro volcó, el niño cayó y fue aplastado en la esquina de Luis de la peña y Pedro Giralt.
Uno de sus familiares lo agarró en brazos, tomó un taxi para llevarlo a un centro médico cercano. El niño llegó con vida al establecimiento hospitalario, pero falleció allí al poco tiempo.
El resto de la familia acomodó el carro y el caballo y abandonó el lugar. Fuentes de la Seccional 19 dijeron a Subrayado que tomaron declaración a toda la familia y derivaron el caso al juzgado penal de noveno turno.
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