Las imágenes de una final infartante y el majestuoso Lebron James

Guiados por un majestuoso Lebron James, el quinteto de Cleveland se consagró por primera vez en la historia de la franquicia como campeón. Además se transformó en el primer equipo en remontar una desventaja de 1-3 en la final de la liga, y acabó con 38 años sin que un equipo visitante se impusiera en un séptimo y decisivo partido de la final.

Sin duda que la gran figura de esta final fue Lebron James, elegido unánimemente como el jugador más valioso, no sólo por los enormes números que estableció, sino que sirvió de inspiración para sus compañeros cuando parecía que los Warriors tomaban control del partido sobre el final.

El tapón que le propinó a Iguodala con menos de 2 minutos por jugar y con el marcador igualado a 89, quedará registrado como una de las mejores jugadas defensivas de la historia.

Pese a la gran actuación de Lebron James, fue el base Irving el que tuvo en sus manos el tiro del campeonato. Con menos de un minuto por jugar, convirtió un triple que terminó desnivelando el marcador a favor de Cleveland.

Para Golden State, y su estrella Stephen Curry, la pérdida de la final supone un duro golpe después de la enorme temporada regular que hicieron, en la que rompieron marcas históricas.

Pero los Warriors no pudieron con el monstruo de James, que cumplió con su palabra de ganar un trofeo de la NBA para Cleveland, después de dos intentos fallidos, uno de ellos precisamente el año pasado ante Golden State.