Figueredo será extraditado a Uruguay antes de fin de mes, dijo su abogada

A cambio ofreció "información relevante". El exvicepresidente de FIFA también es reclamado desde EE.UU. por el escándalo de corrupción en la FIFA.


El exvicepresidente de FIFA, el uruguayo Eugenio Figueredo, será extraditado hacia nuestro país antes del 30 de diciembre, dijo la abogada del dirigente preso en Suiza por el escándalo de corrupción en contratos de televisación en el fútbol.

En declaraciones a 100% Deporte de radio Sport 890. Karen Pintos confirmó que Figueredo logró el acuerdo prometido, a cambio de información relevante para la causa.

Estados Unidos también reclama al uruguayo, quien tiene residencia en ese país.

Pintos había señalado tiempo atrás a Punto Penal que es probable que ese país presente un recurso. Si ello se produjera, la justicia suiza tendrí seis meses para pronunciarse.

De acuerdo a las actas de la investigación, Figueredo habría recibido 10 millones de dólares de coimas por el contrato entre la Conmebol y Datisa, la empresa liderada por Full Play, cuyos dueños -los argentinos Hugo y Mariano Jinkins- por contratos de televisación de Copa América y Copa Centenario 2016.

Figueredo prometió a cambio de su extradición a Uruguay abrir el abanico a otros dirigentes y empresarios regionales y locales que podrìan estar involucrados en esta causa.

La esposa del dirigente recibió amenazas en forma personal cuando transitaba por un shopping de Montevideo.

Ya están presos además de Figueredo, Nicolás Leoz, Luis Chiriboga, Rafael Esquivel y Carlos Chávez. También se entregaron Bedoya, jadue, Burga y más recientemente el paraguayo Napout, presidente de Conmebol, ya extraditado a los Estados Unidos.

Napout logró su liberación provisional al hacer frente a una fianza de 20 millones de dólares, la mitad al contado.

El caso generó además la caída de Joseph Blatter y la casi segura imposibilidad de Michel Plattini de presentarse a una eventual candidatura. Ambos también son investigados por el pago de consultorías, por amañar resultados de partidos y otras irregularidades.

El propio Blatter en 2012 creó una comisión de ética en la órbita de FIFA, la misma que lo suspendió por 90 días y ahora reclama su destitución definitiva.

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