"NO SENTIMOS DESPROTEGIDOS"

Familia de Natalia Lagos teme por represalias y pide seguridad: "Nos sentimos desprotegidos"

La familia de Natalia Lagos teme por los contactos que el expolicía pueda tener fuera de la cárcel para tomar represalias; "no sé qué es lo que puede llegar a hacer", dijo Yanina, hermana de la víctima.

La familia de Natalia Lagos pide protección ante un temor a represalias por parte del femicida de 29 años, que está en la cárcel desde este lunes por 180 días, a la espera del fallo judicial final. Así lo dijo a Subrayado Yanina Lagos, hermana de la víctima.

"Pedimos seguridad, tengo a mi hermana chica adolescente (19 años) que no quiere volver a casa por miedo. Estamos todos con miedo porque él sí está adentro (en la cárcel) pero, ¿y la gente afuera?", expresó Yanina.

Y agregó: "No sé qué es lo que puede llegar a hacer pero nos sentimos desprotegidos (...) Estamos con miedo, no sabemos con qué tipo de persona se maneja él". Dijo que amenazaba a Natalia con matar a la adolescente de 19 años y a su padre.

María Taberne, amiga de Natalia, dijo a Subrayado que "en este momento ellos están desamparados" porque "nadie se ha acercado a ofrecerles ningún tipo de apoyo, y tampoco cuidados". "Ellos están con miedo (...) Necesitan es protección, que les puedan brindar apoyo psicológico para poder salir adelante".

Las declaraciones de Yanina Lagos y María Taberne fueron este lunes mientras familiares y amigos se movilizaban sobre la ruta Interbalnearia, a la altura de Parque del Plata, en reclamo de justicia. Fue horas después de que la Justicia impute por femicidio y otros seis delitos al hombre que mató a Natalia, el pasado miércoles.

El imputado cumplirá 180 días de prisión preventiva mientras el caso sigue bajo investigación, informó entonces Subrayado. La imputación fue por homicidio muy especialmente agravado por femicidio, violencia doméstica, tentativa de homicidio, violación de domicilio, desacato y hurto especialmente agravado.

DELITOS Y VIOLENCIA.

El asesinato de Natalia ocurrió el 2 de agosto cuando el hombre –su expareja, un expolicía de 29 años– fue hasta su casa y la secuestró. Apuñaló a un hombre que estaba con ella, amigo de la víctima, y la ingresó a un auto que estaba en el lugar, a la fuerza.

El agresor condujo hasta la ruta 8. Al llegar al peaje Soca chocó contra una barrera de seguridad. Él quedó atrapado y con heridas. Natalia, de 23 años, murió en el lugar.

Hasta este domingo el agresor estaba internado, y tras ser dado de alta será juzgado en primera instancia en el mediodía de este lunes. Pasadas las 10:30 fue ingresado al edificio de la Fiscalía de Atlántida para declarar, y previo a 12:30 fue trasladado al juzgado de la misma ciudad. Allí fue imputado sobre las 13:30.

"Vamos a estar muy cerca de pedir el máximo de pena", dijo el fiscal del caso, Ignacio Montedeocar.

Fuentes del caso indicaron a Subrayado que el hombre tenía una denuncia por violencia doméstica de la víctima, y también de una pareja anterior; en aquel momento se le había colocado una tobillera. Por ese caso fue dado de baja de la Policía en 2020.

El abogado Rafael Silva, que representa a la familia de Natalia, comenzará a investigar si hubo omisión o responsabilidades del Estado. La víctima había denunciado a su femicida el pasado 13 de julio y había pedido una tobillera para el agresor, o custodia, pero le fue negado.