TRANSFORMACIÓN DE LA EDUCACIÓN

FA contra la reforma educativa: recorte de presupuesto, falta de participación y desmantelamiento de programas

La oposición reiteró su postura contraria a la transformación que impulsa el gobierno. Se refiere a "cambio de nombres a políticas que ya se implementan".

La izquierda emitió una declaración en la que manifiesta “su profunda preocupación ante las políticas educativas que el gobierno lleva adelante porque no resuelven los problemas de la educación pública, no son producto de amplios acuerdos sociales y políticos y desconoce e interrumpe los avances de los años anteriores”.

Desde el FA sostienen que la transformación educativa se pretende aplicar “con restricciones de presupuesto, de tiempos y políticas que deterioran la educación pública y empantanan los cambios necesarios”.

Afirman que la reforma está “basada en eslóganes o cambio de nombres a políticas que ya se implementan” y enumeran las tutorías, el acompañamiento, y los liceos de tiempo extendido, entre otros.

La oposición señala que existe falta de participación de estudiantes, familias, docentes y egresados, “porque no se ofrecen espacios de participación y sus voces son desestimadas”, y sostiene que se excluye a los integrantes de las comunidades educativas del diseño de las políticas. “Contrariamente, se criminaliza, persigue y amenaza a los docentes y estudiantes”.

Acusa al gobierno de “poner palos en la rueda” a los procesos de democratización y descentralización en ANEP, Consejo de Formación en Educación, Universidad Tecnológica y Universidad de la República.

El FA señala un recorte presupuestal en tres años de 140 millones de dólares en educación inicial y de 39 millones de dólares en Udelar, y que la transformación educativa no soluciona los problemas dejados por la pandemia como el aumento de la pobreza infantil, las situaciones de salud mental de la infancia y la adolescencia, la asistencia a clases y los aprendizajes.

Además, expone a los centros educativos a “un comienzo de año lectivo lleno de incertidumbres y retrasos en la elaboración de nuevos programas, regímenes de evaluación y elecciones de horas docentes”.

El FA se manifiesta contrario a los cambios en la Ley de UTEC que “fueron fruto de amplios acuerdos políticos y cree imprescindible avanzar en la creación de la Universidad Nacional de Educación, autónoma y cogobernada, para otorgarle un verdadero carácter universitario a la formación en educación”.

“Es una reforma de papel que difícilmente logre ingresar a las aulas, que no aborda los problemas que tienen nuestras infancias y adolescencias, y que no mejora nuestra educación”, indica.

“El gobierno optó por realizar una transformación educativa en soledad, sin diálogo y por un camino equivocado que no lleva a la mejora de la educación pública”, sostiene.

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