El Tribunal Supremo de Pakistán examina argumentos sobre la crisis constitucional

El Tribunal Supremo de Pakistán comenzó a examinar este lunes los argumentos sobre la disolución del Parlamento y la convocación de elecciones anticipadas, una estrategia que permitió al primer ministro, Imran Khan, evitar el voto de una moción de censura en su contra.

El Tribunal Supremo de Pakistán comenzó a examinar este lunes los argumentos sobre la disolución del Parlamento y la convocación de elecciones anticipadas, una estrategia que permitió al primer ministro, Imran Khan, evitar el voto de una moción de censura en su contra.

Sin dictar sentencia, el más alto tribunal de Pakistán aplazó hasta el martes el examen de las peticiones presentadas por la oposición y el gobierno sobre la legalidad de la negativa del vicepresidente de la Asamblea Nacional de someter a votación la moción de censura del domingo.

La oposición quería sacar el domingo a Khan de su cargo y tomar el poder, tras haber reunido suficientes votos para hacer perder la mayoría parlamentaria a la otrora estrella del críquet.

Pero sus planes fracasaron cuando el vicepresidente de la Asamblea Nacional, Qasim Suri --leal a Khan-- se negó a llevar a cabo la votación, bajo pretexto de que se debía a una "injerencia extranjera".

Minutos después, el primer ministro apareció en la televisión para pedir la disolución de esa institución y convocar comicios anticipados.

Tanto la oposición como el gobierno recurrieron al Tribunal Supremo para que se pronuncie sobre la legalidad del proceso.

En teoría, el Tribunal Supremo es independiente pero muchas veces ha sido acusado de estar a las órdenes de las administraciones civiles o militares.

Según la Constitución, un jefe de gobierno no puede pedir la disolución de la Asamblea cuando se enfrenta a una moción de censura.

Farooq Naek, un abogado con mandato de la oposición, dijo el lunes ante Tribunal Supremo que no entraba en la "prerrogativa" del vicepresidente negarse a celebrar la votación de la moción de censura.

"Es una irregularidad constitucional, combinada con mala fe", dijo.

Khan, de 69 años, atraviesa la crisis política más grave desde que llegó al poder en 2018, en medio de una inflación galopante, con la rupia paquistaní debilitada y una deuda aplastante.

Su partido, Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI, Movimiento de Pakistán por la Justicia), perdió su mayoría parlamentaria días atrás, cuando una fuerza aliada declaró que sus siete diputados se pasaban a la oposición.

Más de una decena de diputados del propio PTI también cambiaron de bando.

Khan acusa a Estados Unidos de querer su renuncia porque se niega a alinearse con las posiciones estadounidenses respecto a Rusia y China.

Desde su independencia en 1947, Pakistán tuvo cuatro golpes de Estado militares y pasó más de tres décadas gobernado por el ejército.

Ningún primer ministro de Pakistán ha completado su mandato.

bur-sjd-fox/cyb/at/es/an/mar/sag/mb

FUENTE: AFP

Temas de la nota

Dejá tu comentario