"Vino con un cuchillo, me pidió la plata y le di un palo. Otra cosa no me quedaba". Así comenzó el relato Sara, una comerciante que evitó ser rapiñada, el lunes al mediodía, en su carrito de Solymar, en Canelones.
"Vino con un cuchillo, me pidió la plata y le di un palo": comerciante evitó ser rapiñada en Solymar, y así lo contó
El delincuente escapó y dejó en el lugar el cuchillo que utilizó para amenazar a la víctima. La mujer esperó por la Policía pero nunca llegó a tomarle la denuncia, según dijo.
El delincuente la amenazó con un cuchillo de 20 centímetros de hoja, pero la víctima tomó un palo que tenía allí y le pegó. "Me dijo: dame la plata. Yo le pegué un palo. El palo lo tengo acá, no me quito que vaya a venir otro (delincuente). Con este palo le di por el medio del lomo, del cuello. Salió medio en cuatro patas", contó a Subrayado.
Ella salió ilesa, y reconoció que se asustó en el momento.
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"La Policía pasó y yo le pregunté. Quedaron en mandarme un móvil (patrullero) pero todavía nada", señaló este miércoles. Y agregó un detalle: "Pasó un móvil, que me compraron una torta frita los muchachos, pero nunca vivieron a tomarme denuncia".
En cámara, Sara mostró el cuchillo que usó el rapiñero. "Acá lo tengo, porque la mujer policía que me compró la torta frita me dijo: dejalo ahí que cuando vengan los compañeros, que nosotros te los vamos a mandar, se lo mostrás".
Al momento de la nota dijo que los funcionarios aún no habían ido. "Todavía no han venido, los estoy esperando pero ya no creo que vengan", cerró. El hombre está prófugo.
El intento de rapiña ocurrió el lunes. El jueves anterior, un supermercado que está a pocos metros de ese carro de comidas, fue asaltado. Dos delincuentes se llevaron dinero e incluso tomaron a una clienta como rehén, informó Subrayado.
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