FRENTE AMPLIO

Dirigente renunció al Partido Socialista por diferencias con la línea de Civila y habló de una "verdadera sangría"

Michael Skafar, secretario político del partido en Colonia, acusó a Civila de "trampear" la democracia interna del sector.

El secretario político del Partido Socialista en Colonia y una de las principales figuras del ala renovadora del Partido Socialista, Michael Skafar, renunció al sector que dirige el diputado Gonzalo Civila por diferencias con la línea política.

Así se suma a la larga lista de dirigentes que abandonaron el sector del Frente Amplio, entre ellos el exintendente Daniel Martínez, el exdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Álvaro García, y el exsubsecretario de Educación, Fernando Filgueira.

“Por intermedio de esta nota presento mi renuncia al Partido Socialista del Uruguay. Lo hago con respeto y fraternidad, desde un profundo desacuerdo con una línea política ajena al legado socialista y con la certeza de que hoy el PS ya no es aquel partido a la cual ingresé hace décadas”, señaló en la carta a la que accedió Subrayado.

Skafar dijo irse con “profundo dolor” después de 40 años de militancia. A eso agregó: “Más allá de la legalidad de las actuales autoridades partidarias, dudo de su legitimidad política ni que representen verdaderamente el sentir de las socialistas y los socialistas”.

Según opinó, no hay legitimidad política “cuando se trampea la democracia interna, llenando planillas de reuniones que nunca se hicieron, falsificando firmas, e incluso no cobrando la cotización a algunos afiliados para luego no habilitarlos a participar”.

De acuerdo a los cálculos de Skafar, ya son 500 las renuncias al Partido Socialista. Por lo que se refirió a este hecho como una “verdadera sangría”. Además dijo que al denunciar el hecho en el último Congreso del sector, la línea ortodoxa reclamó su expulsión.

La carta de renuncia de Skafar al Partido Socialista:

MAS SOCIALISTA QUE NUNCA

Cro. Gonzalo Civila

Compañeras y Compañeros del CEN

Compañeras y Compañeros del CC

Compañeras y Compañeros Socialistas

Por intermedio de esta nota presento mi renuncia al Partido Socialista del Uruguay. Lo hago con respeto y fraternidad, desde un profundo desacuerdo con una línea política ajena al legado socialista y con la certeza de que hoy el PS ya no es aquel partido a la cual ingresé hace décadas luchando contra la dictadura con la gloriosa bandera de “Socialismo es Libertad” más allá de los continuos esfuerzos colectivos por renovarlo.

Con profundo dolor luego de cuarenta y dos años de militancia en el querido Partido Socialista siento debo renunciar a la organización que me formo y de la cual me he sentido orgulloso durante muchos años para mantener en alto los principios por los cuales me afilie al mismo.

Ese orgullo que siempre he sentido de pertenecer al partido que fundo Don Emilio Frugoni fue paulatinamente quedando a un costado debido a múltiples acciones y desaciertos políticos llevados adelante por el conjunto de compañeras y compañeros pertenecientes a la corriente interna que usted encabeza y de la cual usted es directamente responsable.

La práctica impulsada por vuestra corriente de pensamiento fomentando el odio en forma permanente dentro del partido, tanto como los múltiples ejemplos de ataques políticos y personales a quienes no compartíamos vuestra visión, así como vuestro pensamiento de “Más vale pocos, pero buenos” manifestado en más de una oportunidad en los organismos partidarios han dado como resultado una organización enferma.

La misma se ha enfermado a partir de una practica absolutamente antidemocrática que paulatinamente ha ido ganado espacio en la vida partidaria.

Recuerdo algunas reflexiones de nuestro querido Reinaldo “Polo” Gargano poniendo a veces en cuestión al Centralismo Democrático, no quiero imaginar lo que diría al ver a su querido PS, en el sendero de puro centralismo y ausencia de democracia para culminar en el centralismo autoritario.

Más allá de la legalidad de las actuales autoridades partidarias, dudo de su legitimidad política ni que representen verdaderamente el sentir de las socialistas y los socialistas.

No hay legitimidad política cuando se trampea la democracia interna, llenando planillas de reuniones que nunca se hicieron, falsificando firmas, e incluso no cobrando la cotización a algunos afiliados para luego no habilitarlos a participar. Bastaría recordar como ejemplo de lo que digo lo sucedido en el congreso partidario de 2019 donde las planillas de delegados de Montevideo fueron entregadas casi diez y siete horas después de lo que planteaban los reglamentos mientras durante toda la noche vuestros adherentes juntaban firmas para obtener más delegados en el congreso.

Lo anterior a modo solo de ejemplo, se le podría agregar un conjunto de decisiones desacertadas y ajenas al sentir de las y los socialistas, entre otras la política de alianzas que se ha llevado adelante sin ninguna correspondencia con la realidad que viven las departamentales del PS y que lo han manifestado en más de una oportunidad.

Ha sido una constante el desconocimiento y desvalorización de las opiniones de las departamentales del interior a las que permanentemente se busca disciplinar en lugar de liderar analizando y discutiendo con ellas. El centralismo no sólo no ha sido democrático ni montevideano, sino unitario, soberbio y propio de una cúpula que desconoce y menosprecia la riqueza de la realidad y la lucha de nuestra militancia en el interior del país.

Una dirección que ha minimizado las ya casi quinientas renuncias al partido de militantes de todo el país, incluyendo ex legisladores, ex intendentes, ex ministros y a las que día a día se suman nuevas renuncias constituyendo así una verdadera sangría ante la pasividad e incluso beneplácito de la burocracia partidaria.

El histórico partido articulador y cimentador de la unidad de la izquierda se entierra para crear un partido enquistado y testimonial que se habla así mismo.

Todo lo anterior lo he manifestado en más de una oportunidad en los organismos partidarios y como respuesta en el último CC donde volví a manifestar mi visión la respuesta inmediata de los dirigentes de su corriente fue mi pedido de expulsión. ¡Increíble!! Te amenazan con expulsarte por expresar tu pensamiento en un organismo partidario. Una mentalidad de fracción y secta marginal se apoderó de organismos partidarios desnaturalizando su sentido y legitimidad.

En la departamental Socialista de Colonia las practicas que denuncio han sido desterradas hace muchas décadas, en Colonia no afiliamos a nadie para operaciones de congreso, y si construimos socialismo día a día de cara a la ciudadanía y en dialogo permanente con ella. Por esa razón no solo ha sido durante mucho tiempo una departamentales más fuertes del país, donde el PS ha votado mejor sino una de las pocas que ha ostentado tener tres líneas de ediles trabajando en conjunto y presencia en casi el cincuenta por ciento de los concejos municipales.

Por ende, mi renuncia me duele doblemente en cuanto siento debo dejar además a mis queridas y queridos compañeros en colonia con quienes comparto valores y la práctica política ante la acción de permanente destrucción del partido por parte de la dirección nacional.

Hoy reitero esos conceptos y lo hago de cara a toda la militancia socialista.

Por tanto, comprendo a quienes decidieron renunciar, a quienes hoy renuncian como a quienes deciden quedarse en el PS para algún día reconstruir el mismo, los comprendo pues en el PS para mí solo hay queridas compañeros y compañeras jamás enemigos.

El conjunto de nuestra militancia tiene el derecho a conocer las distintas renuncias y sus razones, las mismas la dirección del PS las han ocultado en forma permanente, por tanto, ésta, mi renuncia al momento de ser entregada a las autoridades partidarias la hare pública y la misma será enviada a toda la militancia partidaria pues ese es su derecho.

Al partido de Frugoni, de Paulina Luisi, de Cardoso, de Gargano y de Tabaré lo ha secuestrado una burocracia partidaria que ostenta privilegios y persigue fines personales ante el esfuerzo y entrega de hombres y mujeres socialistas que entregan su tiempo y sacrifican su bienestar personal para llevar adelante sus ideales.

Hoy la ciudadanía del país tiene el desafío de construir dentro del Frente Amplio una opción plural y nacional cuyo corazón sean los valores del Socialismo Democrático, la expansión de derechos y el avance de la modernidad.

Donde estén las y los Socialistas estará Frugoni, Paulina, Cardoso, Gargano, y Tabaré y ese será sin duda el Partido de los y las Socialistas, un partido abierto, respetuoso e integrador.

No me voy porque siempre estuve, Estoy y Estaré en el compromiso de lucha con el principio de “Justicia Social en Libertad”, al decir de Don Emilio Frugoni, sumando a los valores del Batllismo, las enseñanzas de Frugoni, de Paulina Luisi, de Cardoso y Gargano ejemplos de un siglo de lucha Socialista y la obra de Tabaré Vázquez para continuar soñando y creando un país moderno con más bienestar, más libertad y oportunidades de una vida digna para todas y todos.

Hasta Siempre, “Socialismo es Libertad”

Fraternalmente

Michael Skafar

Dejá tu comentario