El cierre de fronteras sigue vigente hasta el 31 de enero, con la excepción del ingreso de extranjeros residentes en el país, tripulantes de aviones que lleguen a Uruguay, prácticos de buques, choferes afectados al transporte internacional de bienes, mercaderías, correspondencia, insumos y ayuda humanitaria y sanitaria.
También están comprendidos los diplomáticos acreditados ante el gobierno uruguayo o ante organismos Internacionales con sede en el país y los extranjeros que se beneficien de corredor humanitario o sanitario que sea establecido para el embarque o desembarque de cruceros, buques y aviones.
La excepción de ingreso por la frontera también rige para los brasileños que, demostrando su condición de fronterizos, ingresen al país por la frontera Uruguay - Brasil y permanezcan en la ciudad fronteriza.
La medida busca evitar la llegada masiva de turistas extranjeros durante la temporada de verano.