Punta de Rieles: la cárcel modelo que “funciona como un pueblo”

Las celdas son para cuatro o seis personas, y solamente se usan para dormir. Se proyecta que haya lugares individuales para que los detenidos puedan tener un espacio de privacidad. Los presos hacen ejercicio y se mueven sin custodia.

Algunos presos le llaman “el barrio privado”, otros le llaman “la cárcel pueblo”. El director de la cárcel, Luis Parodi, sostiene que el principio rector del proyecto de rehabilitación de Punta de Rieles es “estamos convencidos que en un contexto favorable todos los seres humanos mejoran”.

El 80% de los emprendimientos pertenecen a los presos, y en eso trabaja el 85% de los reclusos, según El Observador. También hay detenidos que trabajan para el Estado. Un espacio llamado Inclusión Digital fomenta que los detenidos accedan a Internet.

A gran parte de los presos que trabajan se les permite el uso de celulares para que mantengan el contacto con su familia. También se autoriza que las esposas de algunos presos se queden a dormir con ellos algunos fines de semana.

Según La Nación, la cárcel es modélica, y el sistema carcelario argentino propende a buscar modelos de este tipo, inspirados en Punta de Rieles.