Surgen dudas en caso de hombre muerto en Plaza 1º de mayo

El hombre que murió en la Plaza 1º de mayo en una supuesta rapiña era el padre de una adolescente asesinada en 2004. Sus amigos afirman que no era un delincuente.

 

José Medeiros tenía dos hijas y vivía en Colón junto a su familia. Una mañana de 2004, Leticia, una de sus hijas, fue al liceo y fue interceptada por tres sujetos, violada y asesinada de un balazo en la nuca tras una golpiza. Su cuerpo apareció en el Monte de la Francesa. 

Tiempo después fueron capturados tres de los autores, vecinos del lugar. José vendió su casa y emigró a España con su esposa e hija pequeña.

El pasado sábado José falleció tras recibir tres balazos de un efectivo de Policía que denunció que el hombre lo quiso rapiñar y lo atacó con un cuchillo. La Justicia dejó en libertad al agente, por considerar que lo hizo en legítima defensa.

Sin embargo, Roque, un amigo de José, contó que el hombre extrañaba mucho en España y decidió venir a pasar las fiestas y decidió quedarse un tiempo en Uruguay. Aquí consiguió trabajo y pensaba volverse en unos meses.

Para Roque lo que sucedió con José pudo ser muchas cosas, pero nunca una rapiña: “Él venía de cobrar y llamaron a la Policía porque a él lo estaban rapiñando y se armó una reyerta. Que se haya defendido con el cuchillo no me extraña, me extraña de la forma en que fue baleado”.

El hombre señala además que aunque el policía era muy joven, debe tener entrenamiento para parar a una persona si tiene que hacer uso del arma.

“Esto no es por nada, pero es por mucho. Es por mantener limpio el nombre de una persona que no se merece que la ensucien de esta manera”, afirmó Roque y detalló que no apareció la plata, el pasaporte, el celular ni los documentos de José. Lo único que quedó en el lugar fue la cédula.

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