El PIT-CNT no tiene paz en las últimas semanas. A las irregularidades constatadas por el Plan de Viviendas Sociales (PVS), ahora se le suma la investigación por una cooperativa no oficial que ofrece préstamos a los afiliados a la central obrera, informa hoy El País.
- Nacional >
PIT-CNT investiga ahora una cooperativa de crédito social
Otorgaba préstamos a trabajadores en el Clearing. El caso tiene los mismos protagonistas del Plan de Viviendas Sociales.
Una comisión especial investiga la actividad de la Cooperativa de Ahorro y Crédito del Movimiento Sindical “Futura”, que otorgaba préstamos para vivienda a aquellos trabajadores que no podían acceder a financiamiento por estar en el Clearing.
Según se informa detrás de este emprendimiento está el hermano del coordinador del Plan de Viviendas Sociales, por lo que ambos casos parecen estar ligados de algún modo.
En este caso, la investigación surgió por los cuestionamientos de AEBU, el gremio bancario, a la actividad de la cooperativa. AEBU hizo un reclamo ante el PIT-CNT porque el movimiento sindical no debería estar vinculado a ningún tipo de actividad financiera.
Por esta razón se acordó que la central obrera tomara distancia del proyecto. Sin embargo, en junio de 2013 se utilizó el correo oficial del PIT para enviar publicidad de la cooperativa de varios gremios.
Los integrantes del secretariado desconocían el hecho hasta hace poco.
Ahora la central obrera investiga la relación del hermano de Juan Burgos con los gestores que pedían “donaciones” a cambio de contratos para construir viviendas del PVS. Uno de ellos había sido socio en España del empresario en cuestión, de acuerdo a los datos de la investigación.
Ese vínculo habría sido fundamental para que los gestores consiguieran un contrato en febrero de 2013 para la construcción de 3.000 viviendas sociales. La arquitecta a quien se había otorgado el proyecto fue el detonante de la denuncia realizada por el dirigente de la bebida, Richard Read. En total PVS pretende construir en total 16.500 soluciones habitacionales a precios bajos. Los beneficiarios pagarían cuotas que no superarían los 4.000 pesos.
La profesional había extendido a los gestores a modo de “donación” unos 300.000 dólares en cheques diferidos, el 10% del costo total del plan de viviendas en Maldonado y Rocha.
Los cheques iban a ser cubiertos a medida que el Banco Hipotecario fuera otorgando los adelantos de obra.
Según el contrato, el dinero sólo iba a poder ser utilizado para la compra de más terrenos y para financiar más viviendas, pero uno de los cheques -por 25.000 dólares- fue descontado con un prestamista.
El hecho derivó en la presentación de una denuncia penal ante el juzgado de Crimen Organizado.
Dejá tu comentario