Monseñor Collazzi, segundo cura uruguayo en verse con el papa

Como obispo de la diócesis de Colonia, Colazzi se entrevistó varias veces con su colega de Buenos Aires, a raíz de la gran cantidad de parejas argentinas que se casan en Uruguay. “Él tiene muchas familias amigas en Colonia y en varios momentos estuvo allí”, comentó.

En 1997, ambos jerarcas eclesiásticos volvieron a estar cerca por el Sínodo para América

“Compartimos con el papa la residencia, los almuerzos y las cenas y hasta las caminatas de la mañana que hacíamos junto al Obispo Julio Bonino de Tacuarembó, desde donde residíamos hasta la sede del sínodo, que nos insumía unos 25 minutos. En esas oportunidades pude apreciar las manifestaciones de su forma de ser que eran de una enorme sencillez.”

Dijo además que durante el conflicto de Botnia trabajaron en forma silenciosa ambas Conferencias Episcopales.

Bergoglio fue designado presidente de la Comisión de Redacción de la Conferencia de Aparecida, y allí está uno de los motivos fundamentales de su elección como papa. “Es que la Iglesia necesita imprimir un fuerte espíritu de evangelización, un fuerte diálogo cultural adecuado a nuestro tiempo”, dijo Collazzi.

En ese momento Bergoglio jugó un rol muy importante. “Es una piedra fundamental para la nueva evangelización de la Iglesia que comenzó en América Latina y ahí puede estar uno de los puntos en los cuales, ese espíritu a través de la opinión de los Cardenales electores los llevó a la elección de este papa muy sencillo, que no anda con muchas vueltas y quien creo no necesitará de un chofer para ir hacia algunos lados y si fuera por él lo veríamos caminando por las calles de Roma.”