México le ganó al último campeón del mundo en un partido peleado

México provocó el primer terremoto importante del Mundial de Rusia ganando en su debut 1-0 a la defensora del título, Alemania, este domingo en Moscú, con lo que cobra ventaja en el Grupo F, en el que los hombres de Joachim Löw se complican su futuro desde el principio. El único gol del partido en el estadio Luzhniki, el escenario donde tendrá lugar la final del torneo el 15 de julio, fue obra de 'Chucky' Lozano (minuto 35), que en un contragolpe recibió en la izquierda, fintó a Mesut Özil y terminó batiendo a Manuel Neuer. Los mexicanos suman buenas noticias, ya que el triunfo llega una semana después que el país se confirmara como sede mundialista. La FIFA votó el miércoles que la candidatura conjunta norteamericana organizará la edición de 2026, convirtiéndose así México en el primer país que recibe el torneo en tres ocasiones, tras los históricos 1970 y 1986, escenarios de las obras maestras de Pelé y Diego Maradona. La victoria "Ha sido el mejor gol de mi vida", señaló 'Chucky'. "Todos soñamos jugar un Mundial y tener un debut tan significativo". Con este triunfo, México se sitúa al frente del grupo F, completado por Suecia y Corea del Sur, que juegan el lunes. "Es decepcionante haber perdido el primer partido. Es una situación a la que no estamos acostumbrados, pero tenemos que aceptarlo", dijo el seleccionador alemán Joachim Löw. Fue la primera victoria del Tri ante Alemania en seis partidos oficiales. La Mannschaft, que busca convertirse en el primer país que defiende con éxito la corona desde que lo hiciera Brasil en 1962, había ganado sus últimos siete partidos de debut en un Mundial. "Habíamos diseñado un plan desde hace aproximadamente seis meses y salió bien", declaró el director técnico del Tri Juan Carlos Osorio. El colombiano tenía claro que aislar a sus jugadores del incomparable marco -debut mundialista ante la campeona y frente a 80.000 espectadores- era una de las claves. "Venimos de una ola de pesimismo muy cabrona y ahora tampoco queremos el otro extremo", añadió Javier 'Chicharito' Hernández sobre las críticas al equipo. Héctor Herrera, el capataz Por detrás de Vela y Lozano, la clave era Héctor Herrera, capataz del duelo, ya fuera a golpe de zancada o gobernando el juego estático. Alemania, que el año pasado en semifinales de la Confederaciones, con un equipo 'B', ganaba 2-0 en 8 minutos el mismo duelo para finalizar aplastando 4-1, se encontró esta vez a un equipo mexicano sin complejos en ataque y disciplinado, de pierna fuerte cuando hacía falta, en defensa. Antes del gol de Lozano, las mejores ocasiones de la Mannschaft las tuvo Timo Werner. Primero disparó demasiado cruzado (3) y luego embocó sin colocación a las manos del 'Memo' Ochoa (20). El marcador en contra agitó a la propietaria de cuatro estrellas mundiales, que revolucionó los últimos minutos de la primera parte. Entonces (39) Toni Kroos lanzó una falta que tocó Ochoa y se fue al larguero. Tras pasar por los vestuarios, México dio un paso atrás y esperó a Alemania para matar el partido con un contraataque. Chicharito y Vela tuvieron el 2-0, pero el primer falló en el paso de la muerte al segundo (57). Osorio dejó claro que en la última media hora el objetivo era defender el botín al sustituir a Vela por el joven de 20 años Edson Álvarez, que se situó en el mediocentro, con Herrera ganando unos metros. Alemania rondaba el empate. En el 65, Boateng colgó un balón al área y el lateral derecho Joshua Kimmich se inventó una chilena que se fue por encima del larguero. Márquez, cinco Mundiales Desquiciada, la campeona del mundo no encontraba la manera de batir a Ochoa. Kroos y Draxler multiplicaban sin éxito los disparos. En el minuto 74, Andrés Guardado dejó su puesto y el brazalete de capitán a Rafa Márquez, de 39 años, que entró en la historia de los Mundiales al convertirse en el tercer jugador que disputa cinco fases finales, junto a su compatriota Antonio Carbajal y al alemán Lothar Mathaeus. "No pensé que era mi quinto Mundial, quería ayudar al equipo en un momento complicado", dijo Rafa. "¡Sí se puede! ¡Sí se puede!", gritaban en los minutos finales los casi 40.000 mexicanos que acudieron al estadio. Y finalmente el Tri lloró para celebrar una victoria histórica. Embed