Día clave para Pluna: declaró el "caballero de la derecha"

Calvo llegó a Montevideo ayer por la mañana desde Buenos Aires vía Buquebus. Su testimonio es clave para la jueza Adriana de los Santos, que investiga la liquidación de la aerolínea, informa El País.

Cosmo, la empresa que representó Calvo en el remate de siete aviones Bombardier, tuvo un papel fundamental en el episodio.

La promesa de pago por 137 millones de dólares finalmente no se cumplió. La magistrada quiere saber la relación de Cosmo con Juan Carlos López Mena, el propietario de Buquebus, empresa que al parecer facilitó el negocio. Existen fuertes sospechas que, en realidad,Calvo Sánchez actuó como testaferro del polémico empresario transportista argentino-uruguayo.

Calvo es amigo personal del hijo de López Mena y ocupó cargos gerenciales en Buquebus hasta hace poco tiempo, aunque llegó al remate como ejecutivo de la aerolínea española dedicada a vuelos charters cuyo capital de giro era significativamente bajo.

López Mena fue factor fundamental para que el Banco República concediera a Cosmo el aval de 13.5 millones de dólares para ofertar en la subasta.

En la misma causa están siendo investigados el ministro de Economía Fernando Lorenzo y el presidente del BROU, Fernando Calloia.

Casualmente, hoy Calloia se presenta a declarar en la causa que le iniciara la Asociación de Escribanos del Uruguay, al ser acusados por el banquero de participar de una “operación política” contra el Banco República por la causa Pluna.

Calloia había declarado a radio Sarandí que la Asociación de Escribanos del Uruguay "intimó al escribano del BROU para saber qué había ido a hacer a España. “Es decir, ha sido una operación política absolutamente fantástica, de ataque directo al Banco República, tratando de obtener un rédito político”, dijo Calloia.

CAMPIANI Y COMPAÑÍA. Pluna tiene otras causas abiertas, como la que inició Ancap contra el exCEO de Pluna S.A. Matías Campiani por libramiento de choques sin fondo.

Domingo y lunes, El País publicó con destaque dos notas con Campiani en las que el ejecutivo de Leadgate dio su versión de los hechos y apuntó a “manos oscuras” que pretenden atentar contra él y su familia.

En la causa se investiga no solo a Campiani y al gerente Sebastián Hirsch, sino también a sus esposas. La justicia de Crimen Organizado indaga en las cuentas bancarias de ambas familias.