Así trabajan los repartidores de garrafas en zonas conflictivas

Subrayado acompañó el reparto de una camioneta que ya fue víctima de varias rapiñas en Malvín Norte. Adolescentes amenazaron con robarlos y los vecinos no colaboran.

 

A dos semanas del asesinato de un repartidor de garrafas a manos de rapiñeros de 11, 13 y 15 años en Cerro Norte, los trabajadores del sector mantienen reuniones con empresarios y autoridades de gobierno para mejorar la seguridad en la calle.

El asesinato de ese trabajador fue la gota que derramó el vaso para los distribuidores de garrafas que, según datos del gremio, son víctimas de entre seis y siete rapiñas por día. Reclaman medidas urgentes para dejar de ser blanco de la delincuencia.

Subrayado acompañó una camioneta de reparto de garrafas en Malvín Norte en parte de su recorrida diaria. Julio, el chofer, fue víctima de varias rapiñas desarrollando su trabajo y al pasar por uno de los asentamiento este miércoles se vio como un grupo de jóvenes amenazaba con robarlo.

Además, el trabajador contó que los vecinos no suelen colaborar mucho con ellos. Cuando viajan solos deben dejar la camioneta sin cuidado o pedir especialmente al cliente si puede vigilarla mientras ellos entran la garrafa a la casa.

En esta recorrida, la camioneta tenía dos repartidores pero en general trabajan solos y creen que eso aumenta el riesgo de sufrir robos.

Los distribuidores piden la eliminación del pago en efectivo y la reducción horaria de entregas en determinadas zonas, además del aumento de la vigilancia. Este jueves el gremio tendrá una nueva reunión con empresarios y Ministerio de Trabajo para analizar el tema seguridad. 

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