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A prisión el joven que mató a empresario en Punta del Este
La jueza Adriana Graziuso lo procesó por "homicidio muy especialmente agravado". Quedará recluido en la cárcel de Las Rosas.
La jueza penal Adriana Graziuso procesó a última hora de este lunes al joven de 18 años que el pasado domingo de madrugada asesinó al empresario argentino Horacio Sebaste, de 59 años. Este lunes de tarde la magistrada había realizado la reconstrucción de las circunstancias en que ocurrió el delito.
El empresario y el joven de iniciales BM, que vive en Punta del Este y se dedica a la prostitución (taxi boy) estaban en un apartamento del edificio Siglosol de la parada 3 de la Mansa.
Según confesó el joven de iniciales B.H.M.F. (ahora procesado con prisión) golpeó al empresario y lo asfixió con cloroformo. El joven metió el cuerpo del empresario argentino en la cajuela del auto y se fugó. Cuando circulaba por Punta del Este un piquete policial lo detuvo y se encontró con el cuerpo en el baúl. Eran las 5 y 20 de la mañana del domingo 29 de julio.
La Policía buscaba a una mujer que había denunciado ser secuestrada. Ese caso luego se aclaró. No había secuestro alguno, era un mal entendido.
DOBLE VIDA. Los protagonistas de la historia tenían una doble vida. Sebaste era arquitecto y comerciante, casado y es padre de dos hijos de 27 y 29 años en Las Varillas, un pueblo del este de Córdoba. Su hermano es un importante funcionario diplomático -embajador en Haití- y su familia es muy conocida en la provincia. Su padre fue el fundador del aeroclub local.
Por su parte, el muchacho es novio de la hija de un dirigente político de Maldonado, según informa el diario La Nación. Vive en un barrio humilde cerca del Club de Golf de Punta del Este.
Según manifestó, el cordobés "intentó violarlo", aunque admitió que había llegado hasta el apartamento por invitación de él y que había "un acuerdo" entre ambos.
UN ANTECEDENTE. Hace dos años, el joven autor del asesinato protagonizó un incidente con un decorador de interiores, según informa hoy Correo de Punta del Este.
El decorador trabajaba para un multimillonario industrial argentino residente en la zona de Manantiales.
El incidente estuvo motivado por el uso que el muchacho hacía de la camioneta que el industrial había prestado al decorador.
En un momento, la camioneta fue denunciada como "desaparecida", pero la madre del joven -que en ese entonces era menor- ayudó a la devolución del vehículo y la denuncia fue levantada.
En ese entonces, el joven cursaba estudios en el Liceo Nocturno de Maldonado.
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