Presidencia defiende a Mujica por "pensar en voz alta" en público

En su audición de radio de hoy, Mujica habló de consumismo, medio ambiente, la necesidad de invertir en ciencla y la falta de alternativas a los pañales descartables.



El presidente José Mujica volvió a utilizar su audición en M24 como espacio para reflexionar sobre el "consumismo atroz" y la necesidad de invertir en ciencia y tecnología para "pedirle a la naturaleza que nos ayude" en la salvaguardia del medio ambiente.

El mandatario tomó como punto de partida de su preocupación la reciente gira oficial por Suecia, Noruega y Alemania, países que enfrentan desafíos del "mundo rico lleno de cosas útiles y otras no tanto".

Esta tendencia del presidente por reflexionar en público sobre temas de la sociedad contemporánea, fue abordado en la revista "Políticas", que edita la secretaría de Comunicación de la Presidencia de la República

En el editorial de la publicación, la repartición que dirige el ex diputado Gonzalo Carámbula se señala que al sistema político "le rechina" que Mujica "piense en voz alta, que comunique sus inquietudes directamente a los cuidadanos".

La nota -destacada este jueves por el semanario Búsqueda- señala que el "sistema" reacciona "con virulencia" apuntando que el presidente "habla mucho y hace poco.

Así como en su última audición Mujica abordó sus problemas con la oposición a la que calificó de "mezquina", a raíz de la falta de apoyo para temas como educación, este jueves dedicó sus planteos a cómo equilibrar el sistema capitalista con el cuidado del medio ambiente.

"Por todas partes la gente se queja del derroche del consumismo, del úselo y tírelo. Hay tanto auto que no piede andar, tanto monte para hacer papel, plombemia, montañas de celulares, bosas de nylon, cubiertas de portentosas industrias que consumen energía pero no reciclan estas cosas", dijo Mujica.

El mandatario reconoció que algunos críticos "tienen sólidas razones" para no querer explotar el hierro por sus "efectos contaminantes".

Sin embargo, sostuvo, no se puede escapar "en el fondo a las prisiones que nos impone el modelo civilizatorio".

"Esa gente hace sesudos análisis contra la forestación en hermosas revistas de papel satinado de eucaliptus. Ya no hay manera de volver atrás a la época de los pañales de tela y hacer renunciar a esa especie de liberación de la mujer que supuso en la forma de vivir los pañales desechables. Y aunque todos sabemos que ambientalmente son condenables, nadie lo plantea proque lo matan".

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