Fuentes del caso dijeron que hasta el momento no han establecido contacto con el detenido. Mientras tanto se sustancia el pedido de extradición. La justicia italiana lo sentenció en ausencia a 30 años de cárcel.
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Policía italiana en Uruguay para reconstruir clandestinidad de Morabito
Quieren interrogar a quien fue "el rey de la cocaína de Milán" en los años 90, una figura sustancial de la mafia calabresa Ndrangheta
Conforme pasan las horas, se sabe más de la larga estadía del jefe mafioso Rocco Morabito en Uruguay, país al que llegó desde Brasil en 2002.
Hoy FM Gente informa que el "Rey de la cocaína de Milán" Morabito -que era conocido en Punta del Este como Francisco Capeletto- vivía a 600 metros del narco mexicano Gerardo González Valencia, líder de la banda mexicana conocida como Los Cuinis.
No hay constancia que se conocieran. Sin embargo, según el medio puntaesteño, ambos prófugos de la justicia compartían un empleado de confianza, un hombre originario de Piriápolis.
González Valencia es el hermano del capo de la mafia nacida en Guadalajara.
Morabito era el principal vendedor de cocaína de la mafia calabresa Ndrangheta y uno de los diez delincuentes italianos más buscados a nivel internacional
Morabito vivía con su hija quinceañera y su esposa, una mujer de origen angoleño.
Ha sido un hombre que no comete errores. Prueba de ello son los 23 años en los que se le perdió el rastro.
Pero por esas dos mujeres Rcco cometió dos errores que lo pusieron en el trillo policial.
Primer error: a su hija la inscribió con el apellido Morabito en un centro de educación. esto ocurrió en el mes de junio.
Segundo error: se peleó con su mujer y se fue a un apart-hotel en Montevideo. Los documentos que presentó mostraban inconsistencias lo que alertaron a la Policía que ya sabía que estaba en Uruguay con identidad falsa.
Las huellas digitales de Rocco hicieron saltar las alarmas de Interpol.
Unas semanas antes de la detención Rocco logró zafar de la Policía de caualidad en un perativo pinza desarrollado en ruta 12. Pasó con su auto, presentó la documentación falsa y logró pasar. Pero luego, en la revisación de los documentos, quedó claro que era el hombre buscado.
Se podría decir que ese fue un tercer paso en falso que posibilitó su captura el pasado domingo.
En el hotel se incautaron miles de dólares y documentación falsa, una pistola Glock 9mm, entre otras pertenencias.
Ya en Punta del Este, se incautaron unos 54.350 dólares, una libreta con acciones al portador por 100.000 dólares, un auto Renault Logan, un auto Mercedes Benz 050 del año 2015, joyas y documentación variada, entre ella varios pasaportes y unas 150 fotos de Rocco con distintos aspectos, peinados y colores de piel
La Justicia uruguaya lo procesó como coautor de tres delitos de falsificación de cédula de identidad y de pasaportes en reiteración real con un delito continuado de falsificación ideológica por un particular en calidad de autor. A su vez, dispuso el arresto preventivo por el plazo de tres meses con fines de extradición.
Cuatro meses antes de la detención Rocco vendió un campo de 600 hectáreas a 6.000 dólares la unidad.
Según el diario El País, el empresario inmobiliario Danny Puig fue el encargado de intermediar con un comprador argentino.
Puig además le facilitó el alquiler de la mansión en la zona del Barrio Golf en el mes d ejunio.
"La cuidaron como nadie. El anterior arrendatario fue un chileno que la dejó hecha un desastre", dijo.
En declaraciones a El País, el operador contó su impresión sobre quien decpia ser Francisco Capeletto: "Lo conocí hace tiempo como todo el mundo se conoce acá en Punta del Este. Es un tipo totalmente normal. Cero apariencia de lo que es la imagen de un narco como dicen que es. Todo el mundo que lo conoció piensa lo mismo".
El año pasado, Morabito necesitaba efectivo y vendió otra propiedad, un casco de estancia rodeado por 50 hectáreas de campo en 1.2 millones de dólares.
Los abogados Dellavalle y Balbi dijeron a la prensa que Morabito tuvo una vida legal en Uruguay, dedicándose a los agronegocios.
La esposa de Morabito declaró ante la Policía que sabía que su esposo "había tenido problemas con la ley" pero npo conocía los detalles.
La hija, de 15 años, es la que más está sufriendo la situación.
Puig dijo que ella y su madre están en un hotel mientras se arregla el desorden que dejó el allanamiento policial.
La chica llora mucho y mira todo el día el celular para saber su su padre, contó el inmobiliario.
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