La historia es de película. Un joven de Colón, Entre Ríos, mantuvo una relación amorosa durante un año vía celular y chat con una chica huérfana y con leucemia, que vivía en Jujuy. Cuando por fin iban a conocerse, ella, Sofía Velzi, se descompuso y desapareció. El enamorado, Luciano Benítez, hizo la denuncia y durante una semana la Policía y los vecinos la buscaron incansablemente.
Insólito: ciudad entera movilizada para buscar a una chica que no existía
Sucedió en Argentina. Dos chicas con un perfil falso de Facebook y fingieron su desaparición. La buscaban su novio, familia y la Policía.
Pero Sofía no existe. Aunque parezca increíble, es así. Fue un invento de dos chicas de Colón, que crearon un perfil falso de Facebook y durante un año mantuvieron la relación virtual con Luciano.
Según informa el diario argentino Clarín, el joven presentó la denuncia en la Policía diciendo que su novia había desaparecido cuando venía en ómnibus desde Jujuy para conocerlo.
Supuestamente, Sofía se descompuso y tuvo vómitos cuando estaba en viaje, por lo que debió bajarse para ir a un hospital, al que la fue a buscar su madrina. Luciano iba recibiendo las novedades por mensaje de texto, hasta que su novia le dijo que no tenía más batería y se cortó la comunicación.
Poco después llegó a casa de Luciano una chica llamada Yésica (conocida del muchacho) confirmándole que Sofía estaba camino a Colón, pero que se enfermó e ingresó al hospital y luego desapareció. Y una segunda chica, llamada Marisa, agregó que ella viajaba en el mismo ómnibus y vio todo.
Entonces decidieron hacer la denuncia y comenzó la búsqueda.
Tras el trabajo policial, Luciano se enteró de la estafa de la que había sido víctima. Sofía no existía, era un perfil de Facebook creado por Yésica y Marisa. Durante un año las dos le inventaron una historia de vida completa, le hicieron creer que mantenían una relación amorosa y quisieron poner punto final con la supuesta desaparición.
La Policía de Colón y la Fiscalía le comunicaron a Luciano que buscaron en Colón y Jujuy y no había nadie que conociera Sofía, ni encontraron pistas sobre su familia y tampoco registro de su ingreso en el hospital. Además, investigaron el número desde el que llamaba y enviaba sus mensajes: era el de Yésica.
Ahora investigan quién es la chica de las fotos y cuál es la vía legal para imputar a las autoras del engaño.
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