Tres personas sin trabajo y beneficiarios de programas sociales del Estado figuraban como propietarios de 1.012 empresas unipersonales creadas por dos estudios contables para evadir impuestos, según una investigación de la DGI que está en manos de la justicia de Crimen Organizado.
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Evasión a DGI: tres indigentes figuraban como propietarios de 1.012 empresas
Dos estudios contables fueron allanados y procesaron a cuatro personas. Los testaferros eran beneficiarios de programas del MIDES.
La jueza María Helena Mainard procesó sin prisión a dos titulares de estudios contables y a otras dos personas por incurrir en delitos de defraudación tributaria.
las boletas que salían de estas empresas -que no funcionaban como tales- eran vendidas a otras sociedades para evadir impuestos.
Según informa el País, los estudios contables les pagaban a los testaferros entre 500 y 1.000 pesos para que prestaran su firma en documentos destinados a la creación de empresas.
Se trata de personas indigentes que viven en refugios o recibían prestaciones del Ministerio de Desarrollo Social, indica el informe en base al expediente judicial.
La investigación llevó a realizar varios allanamientos a fines de 2016. En uno de ellos, uno de los testaferros comentó que a él se le pagaba por concurrir a dicho estudio contable desde 2010. Firmaba los papeles, pero no sabía qué pasaba después.
Esta persona aparecía como propietaria de 356 empresas unipersonales.
A mediados de marzo, DGI ya había detectado otras defraudaciones similares por un total de 78 millones de pisos a partir de la creación de una red de unas 200 empresas "de papel" con el objetivo de evadir impuestos.
En este caso se investigaba el papel de decenas de escribanos que extienden certificados notariales para la inscripción de empresas ante DGI.
La creación de unipersonales también sirvió para la mega estafa al Fonasa, que hasta ahora ha provocado el procesamiento de 30 personas.
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