INVESTIGACIÓN

Autor del triple crimen conocía a los marinos y había pedido para quedarse a dormir

Fue compañero de las víctimas y les dio la excusa de no tener donde pernoctar para acceder a la vivienda y ejecutar uno a uno a los militares.

El asesino de los marinos, Juan Manual Escobar de 22 años, Alex Guillenea, de 25, y Alan Rodríguez, de 31, era compañero de sus víctimas hasta el mes de marzo.

Con la excusa de no tener donde quedarse a dormir, el homicida les pidió a sus compañeros para que le dieran acceso al predio, y posteriormente a la vivienda, para poder pasar la noche.

Esa es la principal hipótesis de la Policía y de la Fiscalía de Homicidios, y el motivo por el cual no se encontró el portón principal forzado, ni las aberturas de la vivienda.

Luego, mientras compartieron un rato en el hall de la casa, distendidos, el homicida, de 26 años, fue hasta una de las habitaciones, donde se encontraba un tercer efectivo durmiendo.

En esas circunstancias, aprovechó para sacarle su arma de reglamento, volvió al frente de la casa, y le disparó a uno de los marinos que estaba sentado con su celular, escuchando música. Después, ejecutó de un tiro en la cabeza al otro efectivo de la Armada.

El homicida, caminó nuevamente al fondo de la casa, entró al cuarto del tercer marino, que intentó defenderse, y lo remató de cuatro disparos, según la información que surgió de la pericia forense.

Luego, el asesino, puso las tres armas de los fallecidos en una mochila y se fue.

El hombre caminó hasta una casa cercana, no más de 10 cuadras, llegando al cruce de las calles Bulgaria y Rusia, donde se alojó durante la noche. Allí, alquilaba una habitación a una pareja de amigos.

A primera hora de la mañana, se levantó, fue a la peluquería, se cambió su look y posteriormente pasó por la carnicería. Hizo un asado y agasajó a los propietarios de la vivienda. Según las declaraciones primarias, en ese momento decidió contarles lo que había hecho.

El dinero de las compras que hizo en las últimas horas, lo consiguió con la venta de dos de las tres armas. En el mercado negro se cotizan a unos $ 30.000 aproximadamente.

Sobre esta versión, hay declaraciones encontradas, ya que el homicida acusa a la mujer respecto a la venta de las armas, al tiempo que la mujer indica que en realidad fue el asesino.

En horas de la tarde del domingo, la Policía finalmente recibió información del autor del triple crimen, y el lunes en horas de la tarde, tras un allanamiento, llegó hasta la vivienda del Cerro de Montevideo, donde detuvo a los tres implicados.

Finalmente en la tarde de este martes, la fiscal Morales formalizó por homicidio muy especialmente agravado al autor del crimen, al tiempo que a los otros dos detenidos les imputó el delito de encubrimiento.

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