Regasificadora: oposición investiga coimas al "Gobierno Mujica" desde Brasil

Lava Jato cruza frontera hacia Uruguay. Comisiones ya instaladas o por instalar en Parlamento investigan falta de transparencia en el ámbito político

El largo brazo de la corrupción promovida en materia de obra pública por la constructora Odebrecht -especialmente en Brasil, pero también en Colombia, Chile, Ecuador y Perú- será investigada por la comisión parlamentaria creada para seguir el proyecto de planta regasificadora que estuvo gestionando en su momento la Administración Mujica.

Documentos en poder del Supremo Tribunal de Justicia de Brasil mostrarían indicios de corrupción, informa este sábado El País, e indicarían que un jerarca de alto nivel del gobierno de Mujica habría acordado las condiciones con un lobbista de OAS que además era gobernador de un estado de Brasil.

El proyecto regasificadora quedó postergado por tiempo indefinido en el gobierno de Tabaré Vázquez por su alto costo, sus inconvenientes ambientales, la falta de acuerdo político para su realización y también por los resultados obtenidos con el cambio de la matriz energética.

Sin embargo, la comisión parlamentaria investiga qué relación unió al exgobernador de Minas Gerais Fernando Pimentel con el desembarco en el Uruguay del grupo Odebrecht - u OAS, como se le llama en Brasil- para montar la regasificadora.

Según esta hipótesis Pimentel intercedió ante las autoridades uruguayas para que la constructora se hiciera cargo del proyecto a instalarse en el puerto de Sayago.

La relación entre el exgobernador Pimentel y Marcelo Odebrecht- cabeza visible del multimillonario trust- es un tema de investigación profunda en Brasil.

El miembro denunciante, el diputado blanco Pablo Abdala, dijo que las gestiones de Pimentel podrían ser al menos "un caso de tráfico de influencias".

Sin embargo, la comisión busca pruebas en Brasil de que hubo coimas. Parte de esa gestión se realiza a través de la cancillería presidida por Rodolfo Nin Novoa, señala El País.

La regasificadora de Gas Sayago no terminó de hacer pie, incluso por la polémica desatada por su ubicación. La Armada insiste en que no incidió en la elección del lugar de la planta.

La duda sobre la corrupción en el sistema político fue uno de los temas de la semana en Uruguay. Su punto inicial fue el alcance político del Caso Cambio Nelson, que llevó a oficialismo y a la oposición a la necesidad de revisar los fondos de financiamiento de los partidos políticos desde 1984 hasta la fecha. 

 CORRUPCIÓN SIN SIGNO POLÍTICO

Tanto Pimentel como OAS son foco central de la investigación de corrupción en Brasil conocida como Lava Jato, que tiene jaqueado a todo el sistema político brasileño, ya que cubre los períodos de gobierno de Lula Da Silva y Dilma Rousseff, pero también involucra al actual presidente conservador, Michel Temer, y a muchos de sus colaboradores.

Todo el sistema político había recibido dinero de la constructora a cambio de concesiones de obra pública, especialmente enPetrobrás, una empresa que representa el 10% del PBI de Brasil.

Los favores de Odebrecht, según la investigación, habla de coimas en dinero contante y sonante, y en otros casos disfrazado de jogosos cachets para dar conferencias en el exterior. Es una de las modalidades por las que se indaga a Lula.

En Perú también son investigados por estas conferencias muy bien remuneradas los expresidentes Alan García y Alejandro Toledo

 

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