Prisión para matrimonio español por ladridos de sus dos perras labradoras

La justicia condenó a José Nicolás García e Inmaculada Rodríguez a 21 meses de cárcel. El insólito fallo.

 

Un matrimonio español fue condenado a 21 meses de prisión a causa del ladrido de sus perras, informa este miércoles Huffington Post.

José Nicolás García y su mujer, Inmaculada Rodríguez, fueron demandados un vecino que los denunció por el delito de lesiones.

La pareja fue encontrada responsable por el ruido que supuestamente generaban Nala y Greta, dos labradoras de 12 y 7 años.

El pedido de prisión está suspendido por la apelación, pero hay una campaña de firmas y otras estrategias para evitar que el matrimonio no termine entre rejas.

La denuncia del vecino sigue en pleno auge, pese a que los hechos son historia antigua. Los ladridos, dijo el vecino, eran constantes: entre 18 y 24 horas al día.

La condena ya ha sido recurrida por García pero también por la Fiscalía, que pide siete años y cuatro meses de cárcel para el matrimonio.

El conflicto comenzó en 2010, cuando los García Rodríguez se instalaron en Vegas del Genil, Granada.

"Hasta entonces él había denunciado a otros vecinos, pero de las mías no decía nada, incluso me decía que eran muy buenas", dijo García, docente de profesión. Tras presentar alegaciones ante el Consistorio, el matrimonio fue sancionado por tres faltas administrativas, pero ninguna penal.

Un día García y su mujer recibieron una notificación del juzgado de Granada, que los convocaba a declarar por presuntos delitos de lesiones y contra el medioambiente.

Fue la Fiscalía la que insistió en los delitos de lesiones, apoyándose en un informe médico de un psiquiatra que alegaba un supuesto estrés postraumático, consigna el Huffington Post.

En febrero de 2014 se celebró el juicio. El vecino pidió el sacrificio de las dos perras. Por su parte, el denunciado dijo que nadie hizo un estudio de los niveles de ruido provocado.

Ante la inmediatez de la decisión del juez, una hija del matrimonio salió a juntar firmas en Change.org pidiendo que "retiren la condena de prisión". Hasta ahora recogió casi 68.000 firmas en dos semanas.

Según García, detrás de la denuncia hay un problema de intolerancia religiosa. Poco antes de la denuncia, él le había contado a su vecino que tenía responsabilidades en la comunidad mormona local.

“Le dije que si necesitaba información, le podía explicar en qué nos basamos, pero me contestó que mejor lo miraba por Internet. Fue mirarlo y a la semana siguiente ya tenía la denuncia puesta", afirma.

El conflicto judicial sigue adelante pese a que la pareja no vive allí desde hace dos años. Se trasladaron a la casa del antiguo conserje del colegio de Granada en el que trabaja él, donde no ha recibido la queja de ningún vecino.

Los efectos secundarios del juicio ya se hacen sentir en los denunciados. La mujer y los hijos estuvieron en tratamiento y José Nicolás se encuentra de baja por ansiedad desde abril del año pasado.

El vecino había agregado a la denuncia supuestas amenazas. "Dice que le dejé un post-it en el coche en el que ponía 'hijo del diablo, estás muerto'. Pero, ¿qué gano yo con amenazarle?, señaló.

 

 

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