Un policía mató a la expareja de su novia en Toledo Chico

El crimen ocurrió delante de tres niños de 4, 6 y 8 años. La justicia busca determinar responsabilidades. Hubo contradicciones en las declaraciones de menores y mayores.

 

Luis Eduardo Crossa, de 28 años, y su exconcubina tenían tres hijos de 4, 6 y 8 años y hacía un año que ambos estaban separados y la relación no era buena por la actitud de la mujer, según relataron los vecinos a Subrayado.

El martes, el hombre recibió un mensaje en el que le decían que un individuo estaba en la casa con su expareja y sus hijos. Es entonces que pretendió ir a buscar a los niños a la vivienda que ambos compartían en el barrio Sico de la localidad canaria, para lo cual concurrió munido de una cachiporra.

Al ingresar a la casa se topó con el policía, quien le disparó en dos oportunidades, produciéndole la muerte delante de los niños.

La jueza de Pando, María del Carmen Roybal, dispuso este jueves la reconstrucción del homicidio que duró varias horas para evaluar lo sucedido dentro de la casa.

Además hubo contradicciones entre las declaraciones de los niños y los mayores sobre las circunstancias de la muerte de Crossa.

Momentos de tensión se vivieron cuando los presuntos homicidas eran retirados de la escena del crimen por la Policía. Los vecinos, que presenciaron la reconstrucción, manifestaron su apoyo al fallecido, que -según dijeron- creció en el barrio y no tenía antecedentes penales.

La indignación de los presentes fue tal que arrojaron piedras e inclusive le arrancaron el espejo a uno de los patrulleros.

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